(Dr. Fernando Jiménez del Osi en despacho de alto directivo de Tilivisión Española)
Jiménez del Osi: Lo siento. Compréndanlo. Tengo una formación científica. Soy psiquiatra. No puedo tratar según que temas. Amo la parapsicología. Mi madre dice que “parapsi… algo” fue la primera palabra que pronuncié cuando empecé a hablar. Pero estas chorradas de ahora… Esas autopsias de marcianos cabezones… No me creo nada. Pierdo la fe en lo paranormal. Con estos misterios chorras no me sale poner la voz profunda e interesante. Prefiero dedicarme a partir de ahora sólo a los misterios de la antigüedad, las líneas de Nazca, el Machu Picchu, la mitología hindú, cosas así... Esos si que son misterios, no los de ahora.
Alto directivo tilivisivo: Ya, Fernando, ya… Para hacértelo todo más cómodo, hemos pensado que para esta temporada podríamos buscarte un compañero. Alguien joven, ambicioso, crédulo o que aparenta serlo, con ganas de comerse otros mundos y asustar espíritus sensibles, que cuente medias verdades para que los tilividentes olviden que son medias mentiras, es decir, el complemento perfecto para tu sapiencia y objetividad. El chaval se llama Ikir Jiménez y es un gran admirador tuyo.
Jiménez del Osi. ¡Me opongo rotundamente! ¡No he necesitado jamás escudero! ¡Soy un Quijote de negro que cabalga solo por la cuarta dimensión!
Alto directivo tilivisivo. Perdona Fernando. No te he preguntado tu opinión. O lo tomas o te vas con viento paranormal a una tele local. Por cierto, Para dejártelo todo bien clarito. En esta temporada que empieza no serás tú el Quijote, sino Sancho Panza, puedes abandonar la dieta.
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